Bar Mi Niño Santa Marta de Tormes. Un establecimiento informal que me encontré callejeando por esta población salmantina y que merece la pena la visita
SERXU SOLARES
Santa Marta de Tormes es un municipio de la provincia de Salamanca de 15.000 habitantes que casi podríamos decir que es un barrio de la propia ciudad. Para muchos visitantes pensarán que no han salido de la vetusta ciudad pero sin embargo es un Ayuntamiento distinto. Tiene muchos encantos culturales y comerciales, especialmente atractivos son:
- La Isla de Soto – un pulmón verde en la ribera del Rio Tormes, con grandes espacios para pasear y disfrutar de las aves, la pesca o el deporte. Cuenta con un agility para nuestros amigos los perros de buen tamaño. El proyecto «Arte Emboscado» nos permite disfrutar de una colección de esculturas de gran tamaño que se integran en la naturaleza. Su centro de interpretación te ayudará a comprender la isla y si eres aficionado al trial con tu bici podrás disfrutar en su circuito.
- Museo de arte contemporáneo – Cuenta con una de serigrafías que han recorrido diferentes lugares del mundo, un total de 80 firmadas por cerca de medio centenar de autores. Además se pueden ver obras de gran formato como “La Octava Esfera”, “El Muro Big Data”, “Silencio” o “Naturaleza Salvaje”, esculturas, fotografías y otras obras de menor tamaño.
- Museo de la moto histórica – 50 motocicletas expuestas, ordenadas cronológicamente, que muestran la continua evolución de la mecánica aplicada al mundo de las motos, pudiendo verse las tendencias y soluciones técnicas aplicadas en cada época.
Bar Mi Niño
- DONDE: Calle Lazarillo de Tormes, 2 – 37900 Santa Marta de Tormes (Salamanca)
- QUE: Bar de tapas
- PORQUÉ: Tiene una excelente relación calidad precio. El trato es cercano y familiar
- CUANDO: Domingo de tarde y lunes cerrado – el resto de días cierra a las 15:30 horas y por las noches sobre las 23:30 horas
- COMO: Mi recomendación es que pidas alguna de las tapas ya elaboradas para ir calentando, posteriormente no puedes perderte alguna de las elaboraciones a la plancha, preparadas en el momento.
- IMPRESCINDIBLE: No te puedes ir de esta casa sin probar su famoso Paulino, un móntadito que disfrutarás ¡Garantizado!
- CUANTO: Barato, Santa Marta no es un pueblo barato, te podrán sorprender con vinos que nunca pensarías tomarte por copas así en cualquier sitio. Pero en este caso, se puede comer por muy poco y bien. Eso sí recuerda que es un sitio informal.
- A MEJORAR: La oferta de cerveza, en los tiempos que corren, ofrecer aunque sea de la marca industrial de turno alguna especial (la IPA de Mahou está bien para introducirse en este mundillo)
Una de las mejores cosas que te pueden pasar cuando viajas y estás lejos de casa, es encontrarte con sitios que te hagan sentir bien, que te traten como si te conociesen de siempre y que para ellos seas igual de importante que el cliente que viene todos los días. Esta es una de las cosas que caracteriza al Bar Mi Niño, el trato amable, cercano, familiar, es decir, como si estuvieses en el bar al que vas habitualmente.
Otra de las cosas que siempre se valora es que lo que vayas a meter en tu cuerpo no sea un simple alimento, que vaya un poco mas allá, que te haga disfrutar y si además te lleva a algún rincón de tu vida, pues mucho mejor. En este establecimiento la comida es honesta, respetuosa con el producto y cuidada para armonizar la relación de la calidad con el precio.
No está reñido comer bien y a buen precio. Todo depende de lo que busques, pero si lo que te gusta es la barra, el tapeo, unas cañas o un vino sin buscar el espacio gourmet o refinado (hay tiempo para todo), no dejes de visitar esta casa.
Si vienes a Salamanca, merece la pena darse un paseo por la Isla de Soto y luego tomarte un Paulino alrededor de una lager o un vino. En verano puedes disfrutar de su terraza. No hay vistas, no es el sitio mas bonito, pero no es lo que buscamos.
